"Hoy, para entender hacia dónde vamos, no hace falta fijarse en la política, sino en el arte. Siempre ha sido el arte el que, con gran anticipación y claridad, ha indicado qué rumbo estaba tomando el mundo y las grandes transformaciones que se preparaban. Es más útil entrar en un museo que hablar con cien políticos profesionales"
Ryszard Kapuscinski, Los cínicos no sirven para este oficio (sobre el buen periodismo).
"La empresa francesa BIC puede enorgullecerse no sólo de ser la mayor productora mundial de mecheros: desde 1950, BIC también has sido líder en el sector de los bolígrafos. Probablemente por eso, los franceses digan "bic" en vez de "bolígrafo". Y no es su única victoria, pues tanto los bolígrafos como los mecheros BIC han pasado a formar parte de la colección de objetos de diseño del Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA). A título de curiosidad, diremos que la primera empresa dedicada a la fabricación de bolígrafos de abrió en Inglaterra, y que desde sus comienzos, en 1944, ya proveía a las Fuerzas Aéreas de su país 30.000 artículos de escritorio."
Cult. Iconos de una generación.
El universo de los BIC ha llegado al arte. Juan Francisco Casas, es un pintor de BIC. Sus obras están pintadas enteramente con bolígrafos BIC. Pero ya el éxito de estos sencillos bolígrafos de plástico transparente es una obra de arte.
En la página oficial de la empresa te cuentan su historia y algunas curiosidades como quién es el niño del logotipo. Y para hacerse eco de la cultura que están creando: una galería de arte y de fotografías.
Ayer vi una película que me pareció, por lo menos, curiosa. Once, dirigida por John Carney, es una película irlandesa hecha con muy pocos medios pero con un guión genial.
El protagonista, del que nunca sabemos el nombre, es un músico callejero. Compone unas canciones estupendas, consiguieron engancharme y eso que no soy muy de músicas. Por supuesto, aparece una mujer: Una checa, tampoco nos importa su nombre, que limpia en casas y vende rosas por Grafton Street, Dublín. Se conocen una noche en que él toca en plena calle, le dedica sus canciones a una mujer que se fue, pero de la que sigue locamente enamorado. La checa es una mujer de principios, con ideas claras. Se enamoran pero saben hasta dónde pueden llegar. Los dos son unas personas estupendas con un sentido común aplastante.
Una historia genial, las canciones (otro de los protagonistas de la película) son estupendas. Os la recomiendo vivamente.
(Marina espero que esta no la hayas visto)
En decine21 tenéis una crítica y alguna anécdota. Os dejo con el trailer.
Ahora quería comentar algunas cosas de la trama, así que si no la has visto y piensas hacerlo no sigas leyendo. La relación que tienen ellos dos es muy sana, quizás un poco imprudente porque los dos acaban enamorados (ella está casada). Pero saben, por lo menos la chica, hasta dónde llegar. Nunca cruzan la línea en que ya no serían fieles a sus principios. Me encantó la escena en que él le propone tomarse un último café. Ella sabe que si lo hacen "sería para flirtear". Y añade que "sería bonito, pero no." Un final genial que hace pensar.
Una "poeta" que conozco me dijo que muestra cómo la música les devuelve a ambos la esperanza y las ganas de recomenzar.
- Es curioso, nunca hubiese imaginado que fuera usted un cínico- dijo Keating antes de tomar un sorbo de té.
- Cínico no, querido amigo- replicó el profesor de latín-. Realista. Muéstreme usted un corazón liberado del peso vano de los sueños y yo le mostraré a un hombre feliz.
- El hombre nunca ha sido tan libre como cuando sueña- replicó Keating-. Ésa fue, es y seguriá siendo la verdad.
" Voy a guardar las balas que quedan para las personas que encuentre que estén en el mismo vergonzoso estado en que estábamos usted y yo anoche. Reservaré estas balas para los pesimistas. Y así recorreré el mundo, como una prodigiosa aparición sorpresa. Viajaré llevado por el viento como un vilano y me presentaré tan silenciosamente como una madrugada, tan inesperado como un relámpago, tan irrecuperable como una brisa que se apaga. No quiero que nadie me vea venir, como un chiste que todo el mundo ya conoce. Quiero ser las dos cosas, la muerte y la vida después de la muerte. Voy a coger esta pistola y apuntarle a la cabeza del Hombre Moderno. Pero no la utilizaré para matarlo, sólo para revivirlo. Seré un bicho raro, pero no un aguafiestas."
Chesterton, Manalive.
Que nadie piense que estoy loca. Hay que leer el libro (gran libro que recomiendo vivamente) para entender. Además, esas balas, algunos las cambiamos por palabras.